La transformación digital en las empresas de Latinoamérica (parte 2)

En una primera parte, señalamos los problemas de fondo que han dificultado que las compañías en Latinoamérica hagan una transformación digital. Estos fueron identificados en un reciente estudio del Banco Interamericano de Desarrollo (IDB).

Por medio de este mismo informe, especificaremos cuáles fueron los cambios que se llevaron a cabo antes y durante la pandemia para posibilitar una transformación digital de las compañías en LATAM. También ofreceremos algunas recomendaciones de cómo líderes empresariales y gubernamentales pueden ayudar a facilitar la transición.

¿Cómo fue la adopción de la tecnología digital durante la pandemia?  

Según los economistas Avi Goldfarb and Catherine Tucker, la adopción de tecnología digital fortalece la productividad de las compañías. Irene Brambilla y Darío Tortarolo llegaron a la misma conclusión en su estudio enfocado en el sector manufacturero en Argentina. Por supuesto, esta correlación no es directamente proporcional.

Es la cantidad de variables lo que dificulta determinar si la adopción de tecnología fue el factor decisivo en el caso de las empresas que sobrellevaron la pandemia.

En 2019, justo antes de la pandemia, menos de un cuarto de los pequeños negocios en la OECD y LATAM se involucraban en e-commerce. Por supuesto, varias empresas se vieron en la necesidad de incursionar en esta práctica para sobrevivir.

Aun así, el estudio de BID distingue que las organizaciones que ya habían adoptado tecnologías digitales fueron las menos afectadas durante la pandemia e incluso vieron ganancias.

Cabe aclarar que esto varió dependiendo del sector. Hay negocios análogos que, si bien se vieron obligados a transformarse digitalmente, no se vieron beneficiados por la transición dada su naturaleza. Algunos incluso se vieron obligados a reducir los precios de sus servicios para incentivar la participación de usuarios escépticos.

Paralelamente, IBD también documentó un aumento notable en el uso de tecnologías digitales avanzadas —especialmente la nube, big data, analytics e inteligencia artificial (IA)— en cinco países de Latinoamérica: Argentina, Brasil, Chile, Colombia y México.

El 70% de las firmas que utilizaron estas tecnologías pertenecen a las industrias que producen bienes. El 30% restante proviene de profesionales y consultores en la administración de negocios, ciencias de la computación y telecomunicaciones.

¿Cómo está Latinoamérica en lo que respecta a ciberseguridad?  

No es la primera vez que lo mencionamos: cada vez más negocios están cayendo presa del cibercrimen. El estudio de BID señala que las firmas pequeñas son las más afectadas. LATAM no es la única región afectada. Todos son posibles víctimas.

En el caso de Latinoamérica, el motivo de esta inseguridad es el hecho de que la región tiene muy pocos sitios que cumplan las normas internacionales de ciberseguridad.

¿Cómo ha crecido la economía digital en Latinoamérica?  

Lógicamente, el sector TIC y la economía digital crecen a la par de las tecnologías y transformaciones digitales. Según Makada Henry-Nickie, Kwadwo Frimpong y Hao Sun Friday, el sector TIC contribuye a este proceso produciendo las tecnologías digitales y permeando otros sectores económicos a través de la distribución de dispositivos.

En el caso de LATAM, los unicornios se duplicaron entre noviembre de 2020 y febrero de 2022. Todo parecía indicar que la región era el próximo gran mercado para la tecnología financiera. No obstante, un estudio de CB Insights identifica que estos logros están localizados en los siguientes países: Argentina, Brasil, Chile, Colombia y Mexico.

¿Qué políticas pueden aplicarse para facilitar la transformación digital en Latinoamérica?  

La transformación digital de Latinoamérica no es algo que pueda lograrse de la noche a la mañana. Es un proceso continuo que está lleno de desafíos, muchos de ellos bastante arraigados. A continuación, compartiremos algunos lineamientos que líderes empresariales y gubernamentales deberían seguir para no quedarse atrás.

  • Inversiones públicas y privadas deben destinarse a garantizar la conectividad y el acceso a internet de alta velocidad, además de la continuación del almacenamiento de datos. Esto debe venir de la mano con una legislación que garantice la seguridad de los datos, tanto de los ciudadanos como de las firmas.
  • Ha de mejorarse la ciberseguridad por medio de campañas de concientización, facilitando herramientas de autoevaluación y proveyendo un entrenamiento básico de cómo implementar ciberseguridad en entornos laborales y personales. También deben fortalecerse los servicios de asistencia, facilitar fuentes de conocimiento sobre el tema y entrenar más profesionales capacitados.
  • Poseer talento garantiza el continuo desarrollo de soluciones digitales. Por supuesto, debe ser acompañado por una iniciativa que reduzca la brecha de talento digital. Esto implica crear programas que incentiven la creación de perfiles especializados y el involucramiento de profesionales de otras áreas.
  • Hay que establecer políticas comprensivas que promuevan la adopción masiva de tecnologías digitales. Esto implica proveer asistencia técnica y líneas de crédito que apoyen la transformación digital de las compañías.

La transformación digital es más que la digitalización de funciones o la transición de transacciones análogas a digitales. Implica una reinvención de los modelos de negocio y las formas en que se crea valor. Gracias a la pandemia, muchas compañías fueron forzadas a hacer una transformación digital. Sin embargo, esta es un proceso continuo.

Las empresas deben continuar invirtiendo en lo digital para mejorar su productividad o crecimiento. De lo contrario, se arriesgan a quedarse atrás de sus competidores.