Con el pasar de los años y un sinfín de transformaciones en el mundo TI, podemos decir que estamos en constante evolución. Pero al detenernos a analizar cómo hemos llegado hasta donde estamos como sociedad, hay un factor que recientemente nos ha acompañado: la violencia en redes sociales.
A continuación, se ilustrará mediante la narración de algunos casos de la vida real, el impacto que ha tenido la violencia del internet en la sociedad. Se mostrarán los resultados de un estudio que determina las cuatro reacciones que los seres humanos tenemos al ver contenido violento y se hará una reflexión al respecto.
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Una atrocidad convertida en un video viral más
Uno de los aspectos a tratar en cuanto a la violencia en internet es la difusión del odio como si fuera motivo de estar orgullosos, he aquí un ejemplo:
En el año 2019 en Nueva Zelanda, ocurrió un atentado en contra de la comunidad musulmana. El tiroteo fue ejecutado en dos mezquitas ubicadas en la ciudad de Wellington.
El responsable fue un joven de ultra derecha, quien se describe así mismo como fascista y racista. Hubo 49 muertos y 50 heridos.
Lo más pertubador de todo es que el sujeto, a mucho orgullo, compartió en una transmisión en vivo sus atrocidades en Facebook. El video se propagó de inmediato y la red social tuvo que eliminar 1,5 millones de reproducciones que las personas a nivel global habían realizado. El en vivo también fue publicado en otras redes como 4Chan o LiveLeak.
A esta última red social se le consideró el “youtube macabro“, pues le permitía a los usuarios subir videos de todo tipo de violencia: accidentes aéreos, asesinatos, atentados, peleas, cualquier tipo de contenido explícito que generara morbo y “fascinación” en sus usuarios.
La plataforma surgió como respuesta al cierre de otra que transmitía el mismo contenido llamada Ogrish. Las reproducciones de sus videos oscilaban entre los 16- 20 millones. LiveLeak tomó la elección de no publicar el video y recibió muchas quejas por parte de los usuarios.
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Retos virales para ser más popular
Ahora bien, parece que la violencia en internet ahora es el equivalente a diversión en muchos casos, sobre todo cuando se trata de entretenimiento.
A través de la historia del internet, ha existido un grupo de personas dedicadas a propagar e incentivar la violencia virtual de tal manera que ha llegado a los más jóvenes mediante los famosos retos que se hacen virales.
Por ejemplo, el Fire Challenge: consiste en llenar de alcohol una prenda que tengan puesta, luego prenderle fuego, esperar un poco y sumergirse en agua cuando ya no se aguanta más.
¿Con qué fin? Demostrar quién aguanta más el fuego en su cuerpo. Una niña de 11 años murió al hacer este challenge en el 2020.
O el Choking game, que consistía en ser estrangulado o autoestrangularse solo para sentir placer. Este trend provocó la muerte de un niño de 12 años en Reino Unido en el 2021.
Nuestra reacción al internet violento
En un estudio realizado por la Universidad de Canterbury, Nueva Zelanda, se logró identificar cuatro reacciones diferentes a este tipo de contenido:
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Sufrimiento = placer: había quienes experimentaban estímulos de placer con este tipo de videos.
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Empatía, vulnerabilidad o tristeza.
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Quienes ven los videos para prepararse: por si les pasa a ellos, de tal manera que ya logran insensibilizarse con antipacipación.
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Por rebeldía: para ver lo que es incorrecto en la sociedad, en contra de la censura.
Ya conocemos las posibles razones del porqué nos pueden atraer este tipo de contenido en redes sociales, pero ¿debemos normalizarlo o juzgarlo?
Es importante resaltar aquí que, hay un grupo de personas en la sociedad que se han convertido en héroes sin capa: los moderadores de contenido.
Es gracias a ellos que, gran parte del contenido violento no llega a nuestras pantallas. El trabajo que hacen influye tanto en sus vidas, que muchos terminan con tratamiento psiquiátrico.
¿Cómo proteger a los niños, niñas y adolescentes ante esta clase de contenidos?
Hoy día, los más pequeños se familiarizan con el mundo digital, sin embargo, son más propensos, pues debido a su consustancial inocencia pueden caer más fácil en ser víctimas de algún cibercrimen.
Es por esta razón que, como padres o adultos responsables, debemos acompañar a las nuevas generaciones a implementar un buen uso del internet, de tal forma que siempre estén protegidos y sepan actuar en caso de que lleguen a presenciar algún riesgo.
Para más información, tenemos este blog que detalla más sobre cómo proteger a tus hijos ante los riesgos de la web.
El hombre: ser social y digital por naturaleza
Esta es una invitación a reflexionar qué contenido consumimos y normalizamos en nuestro día a día. Es importante reconocer que esto es un tema sociológico, sin embargo, se ha vuelto inherente a la tecnología puesto que es nuestro nuevo modo de comunicación. Así que nos compete a todos.
Los leemos en los comentarios.
