Muchas organizaciones permiten que sus dispositivos corporativos sean compartidos por diferentes empleados, o los reparten a equipos o departamentos de forma rotativa. Los proveedores de servicios de salud, las empresas de logística, los minoristas y las escuelas suelen implementar dispositivos móviles compartidos para facilitar el proceso de gestión de los dispositivos, reducir los costes de inventario, resolver los problemas derivados de los cambios de espacio de trabajo y gestionar de forma eficiente a los empleados y estudiantes contratados.

Por muy cómodo que parezca el uso de dispositivos compartidos, esta práctica conlleva un conjunto único de retos para las organizaciones, ya que varios usuarios finales tienen que acceder a un único dispositivo corporativo que puede contener muchos datos críticos para el negocio.

Por ejemplo, un servicio de salud. Todos los proveedores de servicios de salud, recepcionistas o médicos necesitan almacenar y acceder a la información relacionada con los pacientes, las directrices médicas u otros datos en el dispositivo y garantizar que ningún dato sensible esté en riesgo.

Una vez finalizado el turno, el dispositivo debe estar listo para que el siguiente empleado pueda acceder a él sin que se cuestione si los datos fueron manipulados o se perdieron durante el turno.

La preocupación de las distintas industrias, como la logística, el comercio minorista y la educación, es la misma. ¿Cómo pueden los administradores de TI implementar un dispositivo para varios usuarios finales, protegiendo al mismo tiempo los datos importantes y el dispositivo?

Las organizaciones pueden permitir el acceso de varios usuarios a los iPads propiedad de la empresa, a la vez que gestionan el iPad; sus aplicaciones, contenidos y cuentas; y mucho más. Como administrador de TI, puede aprovechar esta función al implementar un software de gestión de dispositivos móviles (MDM) en su espacio de trabajo.

Desafíos de la implementación de dispositivos compartidos

1) Gestión de usuarios

Hacer un control de todos los empleados o estudiantes que necesitan trabajar en un iPad específico puede ser una labor en vano, con varios usuarios iniciando sesión en diferentes dispositivos, en diferentes momentos. En un entorno educativo, hay múltiples estudiantes, clases y profesores en escena, y el dispositivo tiene que almacenar los datos existentes, pero también estar fácilmente preparado para que el siguiente grupo de estudiantes pueda acceder a ellos.

2) Seguridad de los datos

Asegurarse de que todos los datos corporativos utilizados o almacenados en un iPad estén protegidos es una tarea difícil si se tiene en cuenta que varios usuarios pueden acceder a un mismo dispositivo. Los iPads corporativos deben estar protegidos con las políticas de seguridad adecuadas que impidan el acceso no autorizado y las filtraciones de datos que puedan poner en peligro la organización.

3) Problemas de almacenamiento

Todos los usuarios necesitan cierta cantidad de almacenamiento para realizar sus tareas, ya sea un trabajador de la salud que almacena historiales médicos o un estudiante que guarda localmente una tarea en un dispositivo.

Hay que impedir que los usuarios finales utilicen más almacenamiento del previsto, ya que esto puede obstaculizar la productividad y la usabilidad del dispositivo para los demás usuarios.

4) Problemas de privacidad

Un dispositivo compartido no gestionado carece de sensación de privacidad, ya que las tareas de cada usuario final permanecen mientras otro se conecta, o los datos del usuario se conservan después de una sesión.

Así es cómo Mobile Device Manager Plus puede ayudarle a afrontar estos retos:

> Con ManageEngine Mobile Device Manager Plus, puede aprovechar Apple Business Manager para llevar los iPads de su organización a la gestión corporativa habilitando el ajuste de iPad compartido. Una vez que los iPads estén inscritos como iPads compartidos, varios usuarios pueden iniciar sesión en un solo iPad mientras que usted puede tomar el control del dispositivo, sus funciones y sus cuentas de usuario simultáneamente. La configuración del iPad compartido le permite crear cuentas locales como lo haría en un PC o laptop, a la vez que le da privilegios para la gestión completa del dispositivo.

> Los iPads compartidos inscritos se asignarán a un ID de Apple gestionado, eliminando la necesidad de utilizar ID de Apple personales en los dispositivos. Esto también facilitará el proceso de distribución de las aplicaciones y la gestión de las licencias de las mismas.

> Se pueden aplicar políticas de uso y seguridad a los dispositivos para proteger los datos de la empresa o de la escuela contra la transferencia o el uso indebido. Por ejemplo, puede restringir funcionalidades en el iPad, como AirDrop, Sincronización de Datos o Redes Móviles. Supongamos que un administrador de TI de una escuela quiere garantizar que los estudiantes sólo se conecten a una red Wi-Fi específica. La configuración Wi-Fi necesaria se puede enviar de forma remota a los iPads requeridos para restringir el acceso a redes no aprobadas.

> Apple asigna automáticamente la misma cantidad de almacenamiento para cada usuario una vez que un iPad se inscribe con Mobile Device Manager Plus, eliminando la posibilidad de un consumo irregular de almacenamiento por parte de un usuario. Si es necesario reutilizar o restablecer un dispositivo, sus datos pueden borrarse de forma remota mediante comandos de seguridad desde Mobile Device Manager Plus.

> Como cada usuario tiene una cuenta local en el dispositivo, puede realizar sus tareas diarias sin interferir con los datos, el correo electrónico, etc. de otro usuario. Para simplificar el proceso de manejo de aplicaciones, puede distribuir aplicaciones a un iPad compartido sin ninguna intervención del usuario, y todas las cuentas de usuario del iPad tendrán las mismas aplicaciones.

Para afrontar de forma eficiente los retos de la gestión de los iPads compartidos en su organización, puede inscribir sus iPads en Mobile Device Manager Plus, una solución de gestión de la movilidad empresarial que ayuda a garantizar la seguridad de los datos al tiempo que proporciona el nivel de privacidad de los usuarios que necesita. Puede automatizar la incorporación de dispositivos, simplificar la gestión de tiendas y aplicaciones empresariales, aplicar políticas de seguridad, solucionar problemas de forma remota en los dispositivos y mucho más.