Retrospectiva de 2023, el año de la inteligencia artificial

Con el lanzamiento de ChatGPT, 2023 definitivamente fue el año en el que la inteligencia artificial (IA) —y no solo la generativa, cabe aclarar— tuvo su auge. Aunque no es necesario ser un investigador o científico para llegar a tal conclusión, la consultora McKinsey realizó un estudio para definir el estado de la adopción de esta tecnología.

A lo largo de este blog, conocerá qué tanto se ha normalizado el uso de la IA, en qué sectores y funciones se ha aprovechado más, y cómo cambiará ciertos empleos.

El uso de la IA se ha normalizado

La IA generativa ha capturado el interés de individuos a lo largo de diversas regiones, industrias y escalas de trabajo. Un 79% de los sondeados confesó que se ha visto expuesto a IA generativa. Un 22% dijo que la emplea regularmente en su trabajo.

Por supuesto, la IA generativa no ha sido exclusivamente de uso individual. Un tercio de los encuestados reveló que sus respectivas organizaciones ya están empleando esta tecnología de forma regular para uno o más procesos. El 60% de las compañías que han reportado adoptar IA está usando IA generativa. No menos interesante, el 40% restante reveló que sus compañías están planeando invertir en esta tecnología.

La encuesta de McKinsey identificó que marketing y ventas, desarrollo de productos y servicios, y operaciones de servicio —tales como atención al cliente y  soporte administrativo— son las funciones que más utilizan herramientas potenciadas por IA.

Aunque todas las industrias se verán afectadas por el auge de la IA, como señala un anterior estudio de McKinsey, el impacto variará. Los sectores que dependen de trabajadores del conocimiento —tales como la industria banquera, farmacéutica y educativa— serán los más afectados. Esto será tremendamente disruptivo para algunos, pero también será una oportunidad para obtener más ganancias.

Al contrario, los sectores basados en la manufactura —tales como la industria aeroespacial, automóvil y electrónica— no se verán tan afectados.

Para dar el siguiente paso, en el que la IA generativa pasará de experimento a un motor de negocio, requiere que las organizaciones enfrenten varios retos:

  • Identificar las oportunidades específicas para la IA generativa dentro de la organización

  • Definir un modelo de operación y gobernanza

  • Establecer una estrategia para gestionar tecnologías de terceros, tales como la nube y los modelos de lenguaje extenso (LLM)

  • Crear un marco de gestión de riesgos

  • Entender las implicaciones de la tecnología sobre la gente

  • Ser transparente sobre cómo encontrar un balance entre obtener ganancias a corto plazo y desarrollar las bases necesarias para escalar a largo plazo

A pesar del interés de la mayoría de compañías encuestadas en adoptar IA generativa, el sondeo revela que pocos negocios están realmente preparados para implementar esta tecnología o lidiar con sus riesgos. Solo un 21% de los encuestados reportaron que sus empresas establecieron políticas de gobernanza para el uso de IA.

En lo que respecta a riesgos, la mayoría de encuestados cita la fata de exactitud de la IA generativa como el principal. Sin embargo, tienden a ignorar la ciberseguridad y el cumplimiento normativo como problemas igual de importantes. Aun así, solo un 32% de los encuestados comentó que está tomando medidas para mitigar la inexactitud.

Solo un 20% de las compañías sondeadas tiene un marco de gestión de riesgos para IA generativa. Este tiene como fin proteger la información sensible. No obstante, los negocios tienden a ignorar riesgos sociales, humanitarios y de sostenibilidad.

La recomendación de McKinsey consiste en probar estas tecnologías por medio de usuarios beta para anticipar posibles consecuencias y definir los mejores resultados.

Los pioneros están sacando provecho a esta tecnología

La encuesta muestra que los pioneros —específicamente, aquellas compañías que atribuyen un aumento del beneficio antes de intereses (BAI) de por lo menos el 20% en 2022 gracias al uso de la IA— continuarán invirtiendo en esta tecnología.

Al ver todas sus capacidades, hay una mayor probabilidad de que los pioneros utilicen IA en el desarrollo de productos y servicios, modelado de riesgos, gestión de desempeño, diseño organizacional y optimización del despliegue de empleados.

Cabe señalar que lo anterior no se limita a IA generativa. Formas más primitivas de machine learning, automatización y chatbots tienen su valor. Según McKinsey, este es uno de los factores que distinguen a los pioneros de los demás competidores.

Otra cosa que distingue a los pioneros de otros negocios es que sus esfuerzos en torno a la adopción de la IA generativa no están tan orientados hacia la reducción de costos. Su objetivo principal con esta es crear nuevos negocios o fuentes de ingresos.

La única área en la que los pioneros tienen que mejorar es que solo un 25% de los encuestados tiene su sistema monitoreado y equipado con alertas instantáneas.

La IA cambiará la forma en que trabajamos

En los últimos 12 meses, las organizaciones que emplean IA contrataron principalmente a ingenieros de datos, machine learning y científicos de datos.

Aun así, un menor porcentaje de los encuestados contrataron a ingenieros de software de IA en comparación con el año pasado. El auge de la IA también ha provocado que ciertos roles —tales como prompt engineering— se vuelvan más codiciados.

Estos hallazgos sugieren que la contratación de roles relacionados con IA sigue siendo difícil. Sin embargo, se ha facilitado en comparación con años pasados. Un anterior estudio de McKinsey señala que los roles más difíciles de obtener son científicos de datos para IA, ingenieros de datos y especialistas de visualización de datos.

Un 75 % de los encuestados predice que la adopción de IA modificará varios roles en la industria. En general se espera que los empleados sean capacitados para integrar IA generativa dentro de sus funciones y así optimizar su efectividad. Solo un 8% respondió que la IA desplazará ciertos roles, entre los que destacan las operaciones de servicio.

El impacto de la IA seguirá creciendo

Un 55% de los sondeados dijo que sus empresas han adoptado IA; y menos de un tercio, que la ha integrado a uno o más procesos. Como se mencionó, estos generalmente corresponden al desarrollo de productos y servicios.

Independientemente de los avances que haya en los próximos años, parece un hecho que las compañías continuarán viendo ganancias en las áreas en las que emplean IA. Por ende, continuarán invirtiendo en esta tecnología. La cuestión será asegurar que todos estos negocios tengan políticas que garanticen el uso responsable de IA.