Sin duda, las aplicaciones se han convertido en las grandes aliadas para muchos, ganando popularidad día tras día. Según estadísticas de AppsFlyer, firma especializada en atribución móvil, la descarga de aplicaciones incrementó significativamente, ya que pasó de 204.000 millones en 2019 a 259.000 millones en 2022.
Cada día se crean aplicaciones móviles nuevas y las exigencias de los usuarios son cada vez mayores. Debido a estos desafíos del mercado digital surgieron las super apps, aquellas que reúnen en un solo lugar todo lo que el usuario necesita, como: servicios financieros, comida a domicilio, compra de artículos, servicio de transporte, entre otros.
El concepto de super app surgió en Asia, específicamente en China, donde los hábitos de la población se basan en el uso permanente del smartphone para realizar todo tipo de tareas. Los nuevos modelos de negocio soportados en las superapps han tenido éxito en dicho territorio y se han expandido a Latinoamérica, donde cada vez toman más fuerza.
Una experiencia integral
Rappi, es un gran ejemplo de super app en América Latina: Inició como una aplicación que se centraba en el envío de comida a domicilio, pero poco a poco ha ido incorporando otros servicios, como trasferencias financieras con Rappipay, o solicitar compras más detalladas con ‘Rappifavor’, entre otros. Ha tenido gran acogida porque brinda una experiencia mucho más integral a los usuarios.
Con este tipo de aplicaciones el cliente ya no debe descargar varias apps (una para domicilios y otra para transacciones financieras, por ejemplo), familiarizarse con su uso, ingresar los datos personales o de pago varias veces y ocupar mayor espacio en la memoria de su dispositivo. Tendrá en un solo lugar todo lo que requiere.
Las aplicaciones regulares han empezado a volcarse a este tipo de apps para obtener una ventaja competitiva, ya que estas tienen acceso a una gran cantidad de datos de los clientes, permitiéndoles conocer sus gustos y necesidades a fondo, generando nuevas oportunidades de negocio para ofrecer soluciones acertadas y oportunas.
Según Gartner, uno de los riesgos de las super apps es que existen usuarios que prefieren interactuar de manera diferente con las aplicaciones; por lo tanto, conseguir el diseño adecuado para el público, junto con la consistencia de las miniaplicaciones incorporadas, puede impactar en la adopción y en la retención de los usuarios.
Revolucionando los servicios financieros
En el campo financiero las super apps se han venido posicionando rápidamente. Mientras los bancos realizan actividades reguladas, estas aplicaciones retienen la experiencia y la relación con el cliente.
KPMG recomienda a los bancos aprovechar en aquellos mercados en los que todavía no hay superapps que lideren estos servicios y apostar por alianzas con actores locales, abrir su arquitectura programática a través del ‘open banking’ y las APIs y crear una super app de servicios financieros.
Es claro que el auge de las aplicaciones seguirá en aumento y la tendencia entre consumidores y las compañías es hacia las super apps. Las empresas deben estar en la capacidad de identificar cómo generar valor a sus usuarios, ligando varios de sus productos y servicios o creando alianzas con terceros para ofrecer la mejor experiencia.