Una reciente encuesta realizada a más de 5.000 CEOs y presidentes de grandes compañías en el mundo muestra que las ciberamenazas están en el segundo lugar de las mayores proecupaciones globales, solo por debajo de la pandemia.

La Encuesta Global de Presidentes de PwC realizada a más de 5.000 líderes de grandes empresas, revela las cinco principales preocupaciones de la economía mundial: pandemia, ciberataques, regulaciones, inestabilidad política y crecimiento económico incierto.

La mayoría de los directores ejecutivos que respondieron a la encuesta son optimistas sobre el crecimiento económico global. Será posible gracias a la continuación de la aceleración digital, que promete productividad y otros beneficios comerciales, pero también aumenta la amenaza de ciberataques y la difusión de información errónea.

Aunque la confianza de los directores ejecutivos en las perspectivas de ingresos de su propia empresa se ha recuperado, también están preocupados: por la trayectoria de la pandemia, la incertidumbre de las políticas fiscales y regulatorias y, en menor medida, por el cambio climático.

El optimismo de los directores ejecutivos también refleja el impulso en el desarrollo y despliegue de vacunas en algunas partes del mundo. El 36% de los directores ejecutivos dicen tener mucha confianza en sus perspectivas de crecimiento de ingresos para el próximo año, y el 47% tienen mucha confianza de cara a los próximos tres años.

Un crecimiento abrupto

Mucho se ha hablado sobre el rápido crecimiento de múltiples ciberamenazas en medio de la pandemia. Sin embargo, este fenómeno también se hizo evidente en la encuesta.  A finales de 2020 las ciberamenazas ocupaban el cuarto lugar en las principales preocupaciones de los CEO con un 33%, pero a fines de 2021 en esta misma encuesta, las ciberamenazas llegaron al segundo lugar con un 47%.

En contraste con el lento ascenso de las preocupaciones climáticas, la seguridad cibernética se ha convertido rápidamente en una fuente de ansiedad. Muy probablemente el aumento de los ciberataques de alta visibilidad durante 2020 y 2021 influyó en este crecimiento.

No obstante, al comparar los datos con América Latina, la ciberseguridad no aparece en el top cinco en el que se encuentran otros temas: pandemia, populismo, inestabilidad política, presión tributaria y regulación. En Norteamérica y Europa, la ciberseguridad es la preocupación número uno.

En Argentina el top tres de preocupaciones fueron incertidumbre jurídica, populismo y presión tributaria; en Colombia, inestabilidad social, crecimiento económico incierto y presión tributaria; en México, incertidumbre política, populismo y pandemia, y en Perú, incertidumbre jurídica, populismo y presión tributaria.

Casi la mitad de los directores ejecutivos planean aumentos del 10% o más en su inversión a largo plazo en transformación digital. Sin embargo, y a pesar de que la ciberseguridad es una de sus mayores preocupaciones, las inversiones en este ámbito no crecerán mucho.

Paradójicamente, a pesar del nivel de preocupación que los CEO registraron sobre los ciberataques, poco menos de la mitad de los que planean una mayor inversión digital también planean aumentar su gasto en ciberseguridad y privacidad de datos en un 10% o más.

Futuro: enfoque en el crecimiento económico

Cuando se les pidió que dieran prioridad a los resultados sociales que las empresas deberían lograr, los directores ejecutivos colocaron la creación de una fuerza laboral capacitada, educada y adaptable en la parte superior de la lista.

Al mismo tiempo, un número creciente de directores ejecutivos busca impulsar la competitividad de su organización a través de inversiones digitales en la fuerza laboral; el 36% apunta a centrarse en la productividad a través de la tecnología y la automatización.

Aunque solo el 20% de los directores ejecutivos están “extremadamente preocupados” por la desigualdad económica como una amenaza para sus perspectivas de crecimiento, la pandemia ha amplificado las asimetrías entre las personas, las empresas y los países, y ha planteado preguntas sobre cómo podemos reagrupar el progreso social y económico.

La conclusión de la encuesta de PwC deja entrever la importancia del actual momento para las sociedades y las empresas: “Mejorar o volver a capacitar a los empleados para permitir su participación plena en la fuerza laboral significa crear economías y sociedades más inclusivas y sostenibles que atraigan a las personas y catalicen conexiones más profundas entre la humanidad y el mercado económico”.