En el vasto océano digital actual, en donde todos estamos conectados e intercambiando información, navegar sin un rumbo claro puede exponernos a peligros acechadores. Es por eso que proteger nuestra privacidad en línea se ha vuelto más importante que nunca. Pero, ¿cómo fortalecer tu ciberseguridad sin repetir los mismos consejos?
¡Acompáñanos en esta travesía y descubre cómo navegar sin terminar como el Titanic!
¿Qué son las cookies?
Las cookies, esos pequeños rastreadores que los sitios web instalan en tu computadora, son como sirenas digitales que te cantan dulces melodías para atraparte en sus redes. Saben qué páginas visitas, qué te gusta e incluso qué productos miras.
Pero no todas las cookies hacen lo mismo, alguien ya se tomo el trabajo y las clasificó de la siguiente manera:
1. Cookies de sesión: Son temporales y se eliminan automáticamente cuando cierras tu navegador.
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Ejemplo: Te ayudan a recordar lo que has añadido al carrito de compras en una tienda online.
2. Cookies persistentes: Duran más tiempo, incluso después de cerrar el navegador, hasta que caducan o las elimines manualmente. Tienen un mayor impacto, ya que pueden rastrear tu actividad en diferentes sitios web.
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Ejemplo: Te permiten mantenerte conectado a un sitio web sin tener que iniciar sesión cada vez.
3. Cookies propias: Creadas por el sitio web que estás visitando. Su impacto en la privacidad es variable, ya que depende de las políticas del sitio web.
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Ejemplo: Se utilizan para recordar tus preferencias de idioma o ubicación.
4. Cookies de terceros: Creadas por otras empresas o sitios web que no son el que estás visitando. Tienen un gran impacto ya que pueden compartir tus datos con terceros.
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Ejemplo: Se utilizan para mostrar publicidad personalizada o rastrear tu actividad en diferentes sitios web.
5. Cookies técnicas: Esenciales para el funcionamiento del sitio web, como permitirte navegar o realizar compras. Generalmente son de bajo impacto, ya que solo son necesarias para la funcionalidad de la página.
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Ejemplo: Te permiten iniciar sesión en un sitio web o acceder a áreas seguras.
6. Cookies de personalización: Recuerdan tus preferencias y te ofrecen una experiencia personalizada.
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Ejemplo: Recomendarte películas o series que te puedan gustar o en alguna red social sugerirte personas a las que seguir:
7. Cookies de análisis: Recopilan información sobre cómo usas el sitio web, como las páginas que visitas y el tiempo que pasas en ellas.
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Ejemplo: Ayudan a los propietarios de sitios web a mejorar la experiencia del usuario.
8. Cookies publicitarias: Se utilizan para mostrarte anuncios personalizados en función de tus intereses y actividad en línea. Son de mayor impacto, ya que pueden rastrear tu actividad en diferentes sitios web y compartir tus datos con terceros.
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Ejemplo: Te pueden mostrar anuncios de productos que has visto anteriormente en otros sitios web.
Pero no te preocupes, ¡puedes escapar de estos cantos hipnóticos! La configuración de tu navegador te permite bloquearlas o eliminarlas periódicamente. Probablemente estás pensando “bueno pero, ¿de qué me estoy salvando? he vivido toda mi vida así y no me ha pasado nada”. Alto ahí, entonces:
¿Por qué deshacerte de las cookies?
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Tendrás tu privacidad bajo llave: Que no quede rastro de tus tesoros. Ya te mencioné toda la información que tendrán a su disposición, ¿estás seguro de que quieres que internet sepa tanto de ti?
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Estarás fuera el acecho: Como te comentaba, algunas empresas usan las cookies para seguirte por la web, stalkearte desde las sombras y jugar a su favor.
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Navegación a toda vela: Las cookies pueden ocupar espacio y ralentizar tu navegador. La próxima vez que digas “¡Que internet tan lento!” recordarás este blog…
Escuche en podcast: TI para ti – ¿Te espían en internet? Descubre cómo proteger tu privacidad con cookies y navegadores seguros
Tu navegador: El timón de tu viaje virtual
Hablando de navegación, el navegador es el software que te permite moverte por los mares digitales, enviar mensajes en botellas y explorar las islas de las redes sociales. Por eso, elegir uno seguro y confiable, y mantenerlo actualizado con las últimas brújulas de seguridad, es vital.
¿Qué barcos te llevarán a salvo?
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Firefox: Un navegador de código abierto, conocido por su seguridad y privacidad.
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Chrome: El más popular del mundo, con un arsenal de funciones de seguridad.
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Ulaa: El navegador de Zoho que incorpora bloqueadores de datos y actividad para evitar que seas rastreado.
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Brave: Bloquea anuncios y rastreadores por defecto, como un faro que te aleja de los peligros.
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Tor: Te permite navegar de forma anónima, como todo un ninja digital.
Más allá del navegador: Navegando con cautela
Sabemos que nunca es suficiente, así que tampoco des por sentado que con esos navegadores tu ciberseguridad está libre de caer en cualquier trampa.
Este es un trabajo constante y por eso, no dejes de actualizar tu navegador con las últimas brújulas de seguridad o de instalar extensiones que bloqueen rastreadores y malware, como un guardián en tu travesía. No olvides tener cuidado con los enlaces sospechosos y por ultimo descarga archivos únicamente de sitios web confiables.
Recuerda: No seas un náufrago de la privacidad online. Sigue estos consejos, toma el timón de tu información y disfruta de una travesía segura en la web.
Déjanos saber en los comentarios qué otros tips implementas tu para protegerte en el mundo digital.