La ciberdelincuencia se ha convertido en uno de los mayores temores para las organizaciones. Una de cada dos empresas en Latinoamérica afirma haber sufrido algún incidente de ciberseguridad durante el 2022, según el último ESET Security Report.

Este panorama demuestra la importancia de tener planes de prevención de ciberataques, puesto que la digitalización y las nuevas tecnologías aumentan el riesgo de ser víctima de este tipo de delincuencia.

Para analizar qué tan preparados están los países frente a las ciberamenazas y qué tan adecuadamente gestionan los incidentes cibernéticos, la e-Governance Academy Foundation ha creado el Índice Nacional de Seguridad Cibernética (NCSI). Este es un ranking que fomenta la cooperación internacional y promueve el intercambio de conocimientos sobre ciberseguridad.

El NCSI se organiza en 3 categorías, 12 capacidades y 46 indicadores. Además, tiene en cuenta los siguientes pasos para su desarrollo:

  1. Identificación de amenazas cibernéticas a nivel nacional

  2. Definición de medidas y capacidades de seguridad cibernética

  3. Selección de aspectos importantes y medibles

  4. Desarrollo de indicadores de seguridad cibernética

  5. Agrupación de indicadores de seguridad cibernética

El índice refleja que el área con mayor nivel de retraso en Latinoamérica es la protección de servicios esenciales. Esto muestra un gran déficit en el seguimiento periódico de las medidas de seguridad y la falta de una autoridad de control competente para supervisar a los operadores de estos servicios.

En cuanto al aspecto que mayor progreso presenta, se encuentra la lucha por el cibercrimen. Este muestra el interés que ha venido en incremento por combatir la delincuencia cibernética en América Latina.

Frente a la capacidad de seguridad cibernética, Argentina lidera la categoría en Latinoamérica con 63.64 puntos. Con respecto al nivel de desarrollo digital, Chile es el líder con 61.45 puntos.

En Centroamérica, el mejor puntaje lo presenta Panamá con 50.65 puntos en cuanto a su nivel de ciberseguridad y Costa Rica posee un buen índice de desarrollo digital con 58.87 puntos.

La creación de políticas de seguridad cibernética presenta resultados muy diferentes en los países de Latinoamérica, ya que Ecuador y Chile llevan la delantera en este aspecto. Paralelamente, países como Perú y Colombia deben trabajar por mejorar sus regulaciones de ciberseguridad.

La perspectiva en cuanto a ataques cibernéticos no es muy alentadora. Gartner predice que “para 2025, el 45% de las organizaciones de todo el mundo habrán sufrido ataques en el software de sus cadenas de suministro, lo que supone un aumento tres veces superior al de 2021”.

Es evidente la importancia de contar con medidas para mitigar la ciberdelicuencia, ya que las predicciones reflejan que estos ataques aumentarán en los próximos años. Según el NCSI, los países de Latinoamérica deben mejorar sus regulaciones y planes de contingencia para enfrentar este retador escenario.