Las tendencias tecnológicas se desarrollan a ritmos muy veloces y las necesidades del mercado pueden llegar a ser abrumadoras. ¿Cuáles deben ser las prioridades para los CIO (Chief Information Officer) durante 2022? Aquí una breve reseña de las tareas impostergables para el año nuevo.
Un reciente artículo de McKinsey plantea una serie de elementos críticos que los CIO deben abordar de manera integral durante 2022, teniendo en cuenta aspectos cómo la nueva normalidad y las próximas tendencias para TI.
Clientecentrismo: un ¿nuevo? Paradigma
Al parecer, nunca es suficiente hablar sobre la importancia de contemplar a los clientes como factores clave en las estrategias empresariales. De igual manera, la cercanía de TI con los clientes es esencial para presentar propuestas enfocadas en satisfacer las necesidades de los clientes.
“Cuanto más alejada esté la TI del cliente, menos podrá entender qué valoran los clientes y cuál debe ser el papel de la tecnología en la entrega de ese valor”, afirma el artículo. Pensar en el cliente, en la oferta de valor que se le hace y en cómo medirla (temas que ya hemos mencionado antes en el blog de ManageEngine) será fundamental para la competitividad empresarial.
Todos en la nube
La migración a la nube ha mostrado muchas de sus ventajas, sin embargo, aún muchas compañías se resisten a esa transformación y prefieren labores de almacenamiento o gestión on-premise, incluso cuando estos métodos pueden resultar más costosos en tiempo, recurso humano y dinero.
No obstante, la nube será el futuro de TI. Entre más pronto ingresen las compañías a este escenario, mejor preparadas estarán para los desafíos del futuro. “Los CIO deben dominar la economía de la nube y centrarse en las áreas de negocios que pueden beneficiarse de las ventajas de velocidad, flexibilidad y escala de la nube”, asegura McKinsey.
Crisis de talento en TI
Con el repentino desarrollo digital impulsado por la pandemia, fue fácil notar que muchas compañías no estaban listas para la transformación digital, y al mismo tiempo se hizo evidente la necesidad de contar con talento humano calificado para los temas digitales, y más especialmente, todos los relacionados con ciberseguridad.
Esta falta de talento humano no termina aún. Varias compañías sufren ahora para formar equipos que tengan no solo los conocimientos, sino también la experiencia y la capacidad para responder a los actuales desafíos de ciberseguridad.
Según McKinsey, la tarea de los CIO debe centrarse en formar estos talentos: “Los CIO deben apostar por el talento creando, primero, una cultura interna que deleite a los desarrolladores. Esto debería comenzar con la creación de un entorno de ‘seguridad psicológica’ (en el que los desarrolladores se sientan seguros al plantear problemas rápidamente, por ejemplo), el factor número uno en cuanto al impacto de la tecnología en el desempeño empresarial”.
Conocimiento en la era del conocimiento
En un mercado que muta constantemente, con miles de ciberamenazas presentando riesgos y un ambiente que exige resultados, mantenerse actualizado y priorizando el conocimiento es esencial para los profesionales de TI.
Estar al tanto de las exigencias de TI, será indispensable según el citado artículo: “Las empresas que están preparadas para aprender y adaptarse rápidamente, ya sea aprendiendo un nuevo lenguaje de programación, utilizando la tecnología para desarrollar un nuevo modelo de negocio, integrando una nueva tecnología o adoptando una nueva metodología, serán las que triunfen”.
Ciberseguridad si, pero simplificada
Ante el aumento de amenazas es apenas normal que muchas compañías fortalezcan sus procesos de seguridad, sin embargo, en ocasiones el exceso de capas y controles termina entorpeciendo la agilidad y resiliencia de la compañía; dos cualidades muy necesarias en un mercado tan dinámico como el actual.
¿Cómo debe ser la nueva gestión de la ciberseguridad? Simplificada. Por un lado, la ciberseguridad debe inyectarse en la cultura toda la compañía, para que sea una tarea de todos y no solo de un equipo específico.
Por otro lado, en los CIO debe prevalecer una mentalidad de desarrollador (con un estilo DevSecOps que involucra la seguridad en cada paso) ante una mentalidad de cumplimiento normativo. Todo esto facilitará el desarrollo de una cultura más ágil y resiliente.
Datos: más calidad que cantidad
Todos los movimientos empresariales o de personas generan millones y millones de datos al día. ¿Qué utilidad tienen esos datos? Recolectarlos puede ser inútil, a menos que se cuente con una estrategia para aprovechar su potencial. Tendencias como Impact-Data y Data-Wrapping son algunos ejemplos.
Es importante dar más valor a la calidad de los datos que a su cantidad. El poder de 10.000 registros de correo electrónico que solo tienen el apellido del cliente no será el mismo de 5.000 registros con todos los datos de los clientes, incluyendo teléfonos, por ejemplo.
Algo similar debe pensarse para establecer experiencias avanzadas para los clientes aprovechando el poder de los datos. ¿Cuáles son los artículos más comprados por el cliente mes a mes? ¿Cuáles son sus gustos e intereses? ¿Qué productos ha marcado cómo favoritos, pero aún no compra? Los datos tienen la respuesta a esas preguntas y pueden ser los nuevos mejores amigos de los equipos de CIO.