Cuando se trata del rendimiento de la red, no todos los retrasos son iguales. La latencia promedio acapara la mayor parte de la atención, pero la latencia de larga duración es a menudo la que socava silenciosamente la eficiencia de su red. Antes de examinar cómo una solución DDI ayuda a reducir las latencias de larga duración y mejorar la eficiencia para ofrecer una experiencia de red sin problemas, aprendamos más sobre la latencia.
¿Qué es la latencia? ¿Cómo mejorar la latencia?
En cualquier entorno de red, la latencia de red ―el tiempo de retardo antes de que comience una transferencia de datos tras una instrucción― es una métrica crítica. La latencia de larga duración es un tipo bastante problemático. Se refiere a los retrasos que experimenta un gran porcentaje de las solicitudes de la red, normalmente las respuestas más lentas o “de cola”. Dichos retrasos pueden degradar significativamente el rendimiento y la experiencia del usuario, sobre todo en redes on-premises que dependen de servicios de red básicos.
Comprender la latencia de larga duración en las redes on-premises
La latencia de larga duración en las redes on-premises se caracteriza por respuestas lentas y retrasadas que suelen afectar del 1 al 5% de las solicitudes de configuración de red. Estas pueden afectar a las aplicaciones en tiempo real y las operaciones esenciales del negocio.
Dos de las fuentes más comunes de latencia de cola son los servidores DNS y DHCP. Estos servicios desempeñan roles críticos en la red. DNS resuelve los nombres de dominio en direcciones IP y DHCP asigna direcciones IP a los dispositivos. Las ineficiencias o la mala gestión de estos servicios pueden provocar latencias de larga duración, sobre todo en periodos de gran demanda o cuando los servidores se sobrecargan.
Causas comunes de latencia de larga duración en servidores DNS y DHCP
He aquí cinco razones por las que puede producirse una latencia de larga duración en los servidores DNS y DHCP:
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Sobrecarga del servidor: durante los periodos de mayor tráfico, los servidores DNS y DHCP pueden sobrecargarse con solicitudes. Esto provoca largos tiempos de respuesta.
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Errores de configuración: los ajustes ineficientes en los archivos de zona DNS o las políticas de alcance DHCP mal configuradas pueden provocar retrasos en la resolución de nombres o la asignación de IP.
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Pérdida y retransmisión de paquetes: la pérdida de paquetes por congestión, especialmente en las consultas DNS o las difusiones de solicitudes DHCP, puede obligar a los sistemas a reenviar los datos.
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Agotamiento de las direcciones IP: si los pools de direcciones IP están mal gestionados, los servidores DHCP pueden tener dificultades para asignar IP. Esto retrasa el acceso de nuevos dispositivos a la red.
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Fallos de la caché DNS: cuando un servidor DNS no puede resolver una consulta de forma local, debe consultar a servidores externos. Esto introduce retrasos adicionales.
Por qué DDI Central es la clave de unas redes más rápidas y eficientes
ManageEngine DDI Central proporciona una plataforma integrada que ofrece un control y una visibilidad totales sobre los tres servicios básicos de red: DNS, DHCP e IPAM. También ayuda a minimizar las latencias de cola que pueden degradar el rendimiento de la red.
Como solución DDI intgral, DDI Central optimiza los tres servicios básicos de red mediante la automatización, una mayor visibilidad, un mejor control y una seguridad robusta. Al agilizar los procesos esenciales que aceleran los procedimientos de conexión de los hosts que se unen a una red mediante la automatización de los servicios esenciales de gestión de nombres y direcciones IP, DDI Central reduce significativamente las latencias de larga duración. Lo anterior ayuda a que las redes on-premises sean más rápidas, fiables y fáciles de gestionar. He aquí por qué se destaca:
1. Rendimiento DNS optimizado para una resolución segura y más rápida
El DNS se encarga de traducir los nombres de dominio de uso humano en direcciones IP que los equipos puedan entender. Cuando las operaciones DNS están mal gestionadas, pueden producirse retrasos en la resolución de los nombres de dominio. Esto se traduce en latencia en la red.
DDI Central mejora la gestión del DNS de varias maneras:
∙ Gestión centralizada de DNS: con DDI Central, los administradores tienen un control centralizado sobre los registros DNS. Esto permite actualizaciones y correcciones rápidas. Cuando los registros DNS están fragmentados o mal gestionados en varios sistemas, pueden producirse retrasos en la resolución de nombres. La interfaz unificada de DDI Central garantiza registros DNS precisos y actualizados. Lo anterior minimiza el tiempo de respuesta.
∙ Almacenamiento en caché DNS eficiente: DDI Central permite a los administradores de red configurar los reenviadores DNS apropiados, además de establecer los ajustes de tiempo de espera en caché y reintentos para optimizar los mecanismos de almacenamiento en caché DNS. Un almacenamiento en caché adecuado de las consultas DNS reduce la necesidad de realizar consultas repetidas a servidores DNS externos. Esto disminuye significativamente los tiempos de respuesta.
∙ Failover DNS automatizado: la configuración de múltiples servidores primarios y secundarios de DDI Central para un único dominio redirige automáticamente las consultas DNS a servidores alternativos durante las interrupciones o periodos de alto tráfico. Esto garantiza la continuidad del servicio y evita la latencia relacionada con DNS.
∙ Resoluciones DNS seguras:
◦ DDI Central refuerza la seguridad del DNS con funciones como las Extensiones de Seguridad del Sistema de Nombres de Dominio (DNSSEC). Estas garantizan que los datos del DNS estén autentificados y protegidos contra manipulaciones. Al evitar ataques como el envenenamiento de la caché, DNSSEC garantiza respuestas DNS más rápidas y fiables. Lo anterior reduce las latencias de cola causadas por interrupciones maliciosas.
◦ Además, el firewall DNS con limitación de la tasa de respuesta (RRL) y las zonas de política de respuesta (RPZ) protegen contra los ataques basados en DNS. Lo anterior garantiza que las consultas se procesen rápidamente sin verse sobrecargadas por el tráfico malicioso.
◦ Las claves de firmas de transacciones (TSIG) proporcionan una autenticación segura entre los servidores DNS. Lo anterior garantiza actualizaciones fluidas y sin retrasos.
◦ Con las resoluciones DNS personalizadas mediante vistas DNS y alcances de zona, los administradores pueden configurar respuestas DNS a la medida para las distintas subredes de clientes. De este modo se optimiza el rendimiento DNS y minimiza aún más las latencias de cola al reducir los saltos innecesarios y garantizar rutas de resolución de consultas directas.
2. La eficiencia del DHCP reduce los cuellos de botella de la red
El servidor DHCP programado con políticas efectivas de asignación de ámbito DHCP asigna dinámicamente direcciones IP a los dispositivos de la red. Las ineficiencias en la gestión de DHCP, como los conflictos de direcciones IP o la lentitud en la asignación de arrendamientos, pueden provocar interrupciones en la red y una mayor latencia. DDI Central mejora las operaciones DHCP de varias formas clave:
∙ Reducción de los conflictos de IP: el sistema DDI garantiza que las direcciones IP se asignen eficientemente. De esta forma se reducen los conflictos que pueden provocar ralentizaciones en la red. Mantiene una visión centralizada y en tiempo real de todo el espacio de direcciones IP. Esto evita una asignación errónea que podría causar retrasos en las conexiones de los dispositivos.
∙ Asignación más rápida de direcciones IP: DDI Central garantiza una rápida asignación de direcciones IP y procesos de renovación. Cuando los dispositivos solicitan una dirección IP, una respuesta lenta del servidor DHCP puede introducir retrasos en el acceso a la red. Con la automatización basada en políticas y las configuraciones óptimas del ámbito DHCP, DDI Central garantiza una rápida asignación de IP. Esto reduce el tiempo que tardan los dispositivos en unirse a la red.
∙ Failover y redundancia para una alta disponibilidad: DDI Central puede garantizar que los servicios DHCP dispongan de failover y redundancia integrados. Esto garantiza que, aunque uno de los servidores DHCP deje de funcionar, el sistema pueda redirigir las solicitudes de IP a otro servidor disponible. De este modo se evitan tiempos de inactividad que podrían provocar latencia.
3. Interfaz intuitiva y práctica para realizar ajustes en tiempo real
Una de las principales ventajas de DDI Central es su interfaz sencilla, intuitiva y práctica que permite a los administradores de red controlar los servicios DNS, DHCP e IPAM en tiempo real. Este acceso directo contribuye a reducir la latencia de varias maneras:
∙ Solución de problemas más rápida: la interfaz integrada permite a los administradores detectar y resolver rápidamente los problemas. Si hay un error de configuración DNS o un conflicto de IP que cause latencia, el administrador puede solucionarlo inmediatamente a través de la interfaz DDI. No hay necesidad de cambiar entre varias herramientas.
∙ Monitoreo y ajustes en tiempo real: DDI Central proporciona monitoreo en tiempo real de los procesos DNS, DHCP e IPAM. Esto permite a los administradores hacer ajustes sobre la marcha. Si un servicio en particular está causando retrasos ―por ejemplo, un servidor DNS sometido a una gran carga―, el administrador puede redirigir el tráfico o añadir servidores adicionales al instante.
∙ Gestión proactiva a través de la automatización: con una interfaz práctica, los administradores pueden establecer reglas de automatización para las operaciones DNS y DHCP. Los procesos automatizados ―como la asignación de direcciones IP con políticas DHCP, el failover de DHCP o DNS, y las actualizaciones de DDNS para los nuevos dispositivos que se incorporan a la red― minimizan el error humano y garantizan que los servicios sigan optimizados para el rendimiento.
4. IPAM integral que evita la sobrecarga de la red y optimiza el plan de direcciones IP
El IPAM es crucial para supervisar la asignación y el control de las direcciones IP dentro de una red. Un IPAM efectivo garantiza que la red funcione sin problemas. Evita los cuellos de botella que pueden provocar latencia.
∙ Utilización eficiente de las direcciones IP: DDI Central con su IPAM integrado proporciona información detallada sobre cómo se utilizan las direcciones IP en toda la red. Al evitar la infrautilización o la sobreutilización de direcciones IP, esta solución reduce el riesgo de agotamiento de subredes o de sobreasignación. Lo anterior puede provocar retrasos y un enrutamiento subóptimo.
∙ Gestión automatizada de direcciones IP: en lugar de gestionar manualmente los grupos de direcciones IP, DDI Central automatiza el proceso con el gestor de alcance de las políticas DHCP. Esto garantiza una asignación más rápida y precisa, lo que minimiza los retrasos asociados a los errores de direccionamiento IP.
∙ Mejor planificación de direcciones IP: al ofrecer a los administradores de red visibilidad en tiempo real del uso de las direcciones IP y de la planificación de la segmentación, DDI Central garantiza que cada segmento tenga suficiente capacidad de direcciones. Esto mejora la eficiencia general del enrutamiento y minimiza la latencia.
5. Gestión centralizada para un rendimiento constante de la red
Al integrar DNS, DHCP e IPAM en una plataforma centralizada, DDI Central reduce la latencia que puede surgir al gestionar estos servicios por separado. Cuando cada servicio se gestiona en silos, pueden producirse retrasos. Esto se debe a las brechas de comunicación entre los servicios. Lo anterior garantiza una interacción fluida entre los procesos DNS, DHCP e IPAM. Dicha interacción tiene las siguientes consecuencias:
∙ Mejor sincronización: los cambios realizados en un servicio (por ejemplo, las actualizaciones de DNS) se reflejan inmediatamente en los servicios relacionados (por ejemplo, DHCP o IPAM). Lo anterior evita desajustes en la configuración que podrían introducir latencia.
∙ Informes y análisis unificados: DDI Central proporciona una visibilidad completa de cómo interactúan estos servicios de red. Al identificar y solucionar los posibles cuellos de botella antes de que escalen, los administradores de red pueden mantener un rendimiento constante de la red y evitar los picos de latencia
Un enfoque proactivo para reducir la latencia de larga duración
La latencia de larga duración es un reto importante en las redes on-premises, sobre todo cuando afecta a los servicios DNS y DHCP. Este retraso puede ralentizar procesos críticos, desde la resolución de nombres de dominio hasta la asignación de direcciones IP. En última instancia, reduce el rendimiento general de la red.
DDI Central puede reducir drásticamente las latencias al proporcionar un mejor control, automatización y visibilidad de los servicios centrales de la red. Con un mejor balanceo de carga, monitoreo en tiempo real y administración inteligente de recursos basada en políticas, DDI Central garantiza que los servidores DNS y DHCP operen eficientemente. Esto minimiza los retrasos y proporciona una experiencia de red más rápida y confiable para los usuarios.
Implementar DDI Central es algo más que mejorar el rendimiento. Se trata de preparar su red para afrontar los riesgos de las latencias de cola. ¡Proteja la experiencia del usuario y las operaciones de su organización!
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