El sector salud ha aprovechado la tecnología para seguir atendiendo a sus pacientes a pesar de las restricciones de movilidad y el distanciamiento social. ¿Hacia dónde van las tendencias del sector salud? ¿Qué pasará en el futuro con la telemedicina? Aquí algunos datos interesantes sobre cómo evolucionarán la tecnología y la medicina.
La pandemia del Covid-19 ha generado transformaciones profundas en diversos sentidos; desde las relaciones personales hasta la economía global, todas las esferas de la sociedad se han enfrentado a retos nunca antes pensados, y el sector salud no es la excepción.
Una reciente encuesta realizada a médicos estadounidenses durante enero y febrero de este año demostró que el personal médico está cada vez más interesado en aprovechar las bondades de la telemedicina para facilitar la atención medica de quienes por diversas razones no pueden asistir físicamente a un centro médico.
El uso de la historia clínica electrónica ha crecido en un 38% en relación con 2018 y se espera que el uso de la telemedicina tenga un boom durante los próximos años, según los datos recogidos en la citada encuesta.
No obstante, en algunas regiones el uso de la telemedicina no es masivo por diferentes motivos: falta de conocimiento de los profesionales de la salud en relación con las herramientas que podrían usar, escasas inversiones de las empresas en equipos de cómputo y redes que permitan esta práctica, el poco acceso de un alto porcentaje de la población a computadores, dispositivos y redes de buena calidad, entre otras.
Llegando a una nueva dimensión
La telemedicina es mucho más que la comunicación a través de internet; por ello hay que considerar algunas variables que pueden resultar definitivas para el éxito o el fracaso de la implementación de una estrategia de telemedicina.
Aprender a usar las herramientas correctas es esencial: los doctores tendrán que aprender a realizar consultas de telemedicina y conocer los aspectos técnicos, para lograr una comunicación fluida y obtener la información que necesitan.
La integración de los datos es otro aspecto que el personal médico considera importante para el éxito de la telemedicina en el mediano y largo plazo, solo así se podrá establecer cuáles son las buenas prácticas que se pueden mantener en un modelo de atención a distancia y cuales deberán realizarse de manera presencial.
Adicionalmente, la promoción de los buenos hábitos y de la medicina preventiva será de gran importancia en el futuro próximo. Evitar las enfermedades resulta ser mucho más eficiente para los sistemas de salud, que la atención de las patologías.
¿Cómo será el futuro?
Una reciente investigación de McKinsey titulada ‘Priorizar la salud, una prescripción para la prosperidad’, asegura que la pandemia podrá costarle a la economía global, cerca del 8% del producto interno bruto. Sin embargo, la mala salud cuesta el doble: alrededor del 15% del PIB mundial por muertes prematuras y pérdida de potencial productivo entre la población en edad laboral.
Potenciar el alcance de la medicina aprovechando todas las herramientas (como la telemedicina) podría ser una oportunidad para acelerar la recuperación económica. Se requieren dos procesos a futuro: impulsar la salud preventiva en lugar de la reactiva, y concebir la salud como una inversión y no como un gasto.
Teniendo en cuenta estos datos, el panorama de la salud en el futuro podría lucir asi:
- Inteligencia artificial: De acuerdo con McKinsey, la industria médica y farmacéutica podría ahorrarse más de 100.000 millones de dólares si utiliza la inteligencia artificial para la gestión de la big data, particularmente con aquella enfocada en el modelado predictivo de procesos biológicos y el diseño de medicamentos.
- Monitoreo remoto: Northwell Health es una red de atención médica integrada sin fines de lucro ubicada en Nueva York, que está impulsando las Tele-UCI (tele unidades de cuidado intensivo) para brindar cuidado a personas en estado crítico, aprovechando la tecnología y monitoreando constantemente la evolución de los pacientes gracias a equipos portátiles.
- Weareables: Los dispositivos de esta clase (los smartwatch son el mejor ejemplo), podrían ayudar a realizar un monitoreo preventivo, para seguir los indicadores vitales de los pacientes y realizar alertas tempranas. El 49% de los estadounidenses usa uno de estos dispositivos y se espera que este mercado llegue a los 27 mil millones de dólares en 2022.
- Robots: Según Credence Research, el mercado de robots médicos superará los 20 billones de dólares para el año 2023. No serán robots que hagan cirugías complejas (no aún), pero hay varios modelos que sirven como asistentes de los doctores e incluso con un nuevo modelo de ‘telepresencia’: robots que van a zonas apartadas para transportar suministros médicos, apoyar a pacientes en rehabilitación y optimizar la toma de algunos exámenes.
En aprendizaje
El sector salud ha tenido que enfrentarse a la pandemia sin tiempos de preparación, sin tiempos de ensayo, sin opciones de planes piloto. Atender a los pacientes en medio de esta contingencia ha sido su prioridad y ha tenido que lidiar con desafíos que ningún otro sector ha enfrentado.
Si le interesa este tema, compartimos el conversatorio que desde ManageEngine realizamos con con Herman Maseberg, Gerente de Seguridad Informática de Swiss Medical (organización médica con más de un millón de afiliados), para comprender cómo el sector salud ha respondido a los desafíos de garantizar la atención médica en medio de una pandemia.